Thursday, November 03, 2005

Por las calles de la ciudad de la furia

La semana pasada, mientras yo recorría alegremente Guayaquil city, primogénita recorría lugares de internación porteños. La cosa fue así: mientras pequeño oko levantaba su creatinina en el Lanari, al viejo rubio, posiblemente influenciado por la noticia, casi le da un bobazo. Un fuerte dolor en el pecho lo dejó durmiendo dos noches en el Cemic de Saavedra. Es probable que de aquí a poco necesite otro by pass, veremos. Encima, la directiva del rubio fue no darnos parte ni a mí que estaba fuera para no preocuparme, ni a pequeño oko que con su propia internación ya tenía suficiente. Con lo cual, linda película se tuvo que mangiar sola la pobre primogénita. Parecía la madre Teresa, de un hospital a otro. Por suerte para el final de la semana cada uno estaba en su casa.

El sábado, en el campeonato de fútbol, mientras mi equipo ganaba 2 a 1 en mi ausencia, en la cancha vecina cayó muerto un pibe de 25 años, de un ataque al corazón. Un drama total, menos mal que yo no estaba porque ver esas cosas me pega para atrás.

Desde que volví no pasa nada. En el laburo no hice más que mirar la computadora y hacer que trabajaba. Cada vez que vuelvo de viaje es lo mismo, físicamente estoy acá pero mi cabeza aterriza unos cuantos días después, cuando la inmensa torre acumulada sobre mi escritorio amenaza con caérseme encima.

La inflación está golpeando a mi puerta. Mail de madrid: propietario de mi humilde departamento piensa en euros y quiere aumentar considerablemente el alquiler. Llamado telefónico: dueño del hogar de ex buscapanner también pugna por una actualización. Lo único que no aumenta es mi paga.

El lunes llevé a la petisa a cenar a lo de madder, nos dio comida especial porque estaba pequeño oko y no hay que tentarlo. Hicimos nuestra buena acción del día. Mi ración estaba más seca que lengua e loro. Martes, comida en lo de primogénita, con el rubio recuperado en la mesa. Un goulash de la san puta, me rompí la boca comiendo. Entre rubio y cuñado aplicado me quemaron la bocha, quieren que vuelva a dar clases en la facultad. Yo no quiero, no tengo tiempo y a la facultad no vuelvo más, se los dije mil veces. No lo entienden, me fumé un cigarro, acusé cansancio y me dí a la fuga.

Ayer fuimos con la petisa a ver Tiempo de valientes. Peretti y Luque, muy bien los dos. La historia de Szifrón no me terminó de convencer. Con los simuladores nunca me enganché tampoco, tal vez no es lo que más me gusta. Me pareció una comedia muy bien actuada, para pasar el rato y nada más. Esperaba otra cosa, no una mezcla de lugares comunes de películas de detectives de Hollywood. Sí me gustó cómo está filmada, tomas y efectos especiales muy convincentes. Un guionista a la derecha....

Hoy partí a la aventura. Tempranito a vialidad, atrás del autódromo, a renovar registro vencido hace casi un año. El otro día me enteré que al año de vencido hay que salir a esquivar conitos con un instructor al lado y antes que eso decidí enfrentarme a la burocracia. ¡Qué trámite insufrible, dios mío! Cuatro horas como un boludo haciendo colas para distintos exámenes que, de tan ridículos, hasta Mr. Magoo hubiese sorteado con éxito. Al visual entré con anteojos y nadie me dijo nada. En el audio me clavaron unos auriculares y me pasaban sonidos agudos, piiiii, levanté la mano dos veces y listo. La psicóloga me preguntó cosas tales como: ¿alguna vez estacionó sobre la vereda? ¿tuvo accidentes muy graves? ¿sale con su coche a atropellar niños? El chabón del exámen físico, lo delataba un calendario en la pared, era del casla y nos la pasamos hablando de fútbol. Finalmente, un teórico que consistió en adivinar un cartel de contramano y otro de prohibido girar a la izquierda. Digo, para preguntar pelotudeces que te lo den directamente, ¿para qué perder tantas horas cagado de calor si de todas formas aprueban a cualquiera que después te pisa en la calle?

Dicho y hecho, a la vuelta, de estreno, manejé peor que nunca. Me colgué en la general paz, perdí la autopista y di la vuelta más larga del mundo. En medio del tráfico casi me llevo un motociclista que todavía me está puteando. Por suerte no pasó nada. Tengo licencia hasta el 2010 amigos, ex buscapanner satisfecho...