Thursday, November 30, 2006

Wednesday, November 29, 2006

Lecturas de viaje: un día como para quedarse en la cama

Le gustaba apostarle al destino y sabía que la suerte era fundamental para la victoria, pero confiaba en su "técnica". Mientras esperaba a su presa, que se demoraba dentro del cajero de Colonia y Julio Herrera, se imaginaba la corrida entre la gente sin sacar la vista del objetivo. Después, el manotón y los gritos que iba dejando atrás mientras revisaba la billetera robada. La víctima salía del cajero. Corrió derecho a él. La ductilidad era tal que pudo meterle la mano en el bolsillo casi sin dejar de correr. Sintió el dinero en su mano. De pronto dos policías de la Turística lo empezaron a seguir: eso se llamaba problemas. Dobló por Río Branco con tanta "suerte" que pasó por la puerta de Policía Turística y otros dos policías se unieron a la persecución. Desesperado volvió a doblar y alucinó: de frente venía una moto policial. Él lo sabía: eso se llamaba perder. Pero no era todo. En ese momento se dio cuenta que corría con $ 25 porque el hombre llevaba el grueso del dinero en la camisa. Se detuvo. Ya sentía las manos de los policías que lo agarraban. Pensó que no tendría que haberse levantado de la cama, pero ya era tarde.


(crónica policial publicada en el diario el país de montevideo, el día sábado 18 de noviembre de 2006)

Tuesday, November 28, 2006

Vistas del uruguay: patente

cri cri

Hay un aviso que pasan por la radio que es muy gracioso. Personalmente creo que tenés que ser más ingenioso para que te salga algo creativo o gracioso para radio que para televisión. Sencillamente por el poder de la imagen, que muchas veces vale más que mil palabras. O, como hacen ahora, te ponen una cancioncita o un jingle pedorro y una sucesión de imágenes. Puede estar bueno, pero que es más fácil lo es. Igual cada día miro menos televisión y escucho más radio. Volvamos entonces al aviso. No me acuerdo de qué carajo era porque no soy muy consumista ni presto mucha atención a esas cosas. Hay quienes dicen que si no te acordás el producto publicitado entonces el aviso es malo, porque no cumple su objetivo que es, justamente, publicitarlo. Suena lógico, pero yo no creo que sea así. No tengo una fundamentación concreta, simplemente no creo que sea así, o me chupa un huevo en realidad. Lo que sí sé es que hay avisos que me divierten más que otros. Hace poco pasaban ese que escuchabas charlando a varios amigos y le preguntaban a uno: ¿qué tal tu fin de semana? y el tipo todo cagado de risa relataba un periplo insólito y aburridísimo, que incluía concursos de ecuaciones matemáticas, paseos de tortugas y colecciones de estampillas, como si fueran programas de la gran puta. Además había dos o tres versiones distintas y eso lo hacía más entretenido. Pero el aviso que digo es otro: también se oye a varios amigos reunidos tirando comentarios, en este caso acerca de cosas que son capaces de hacer en situaciones incómodas: uno dice, ponele, ¿y nunca te pasó que abriste la heladera y no había nada de nada y te terminaste comiendo un limón porque estabas muerto de hambre? Sisisis, contestan todos. Y otro tira ¿y nunca te pasó tal otra cosa? Y el resto de nuevo sisisis. Hasta que uno dice: ¿y nunca les pasó que tenían todos los calzoncillos lavando y no tenían qué ponerse y se clavaron una bombacha de su hermana para zafar? Y ahí los demás se quedan callados y otro con voz de asco le pregunta: ¿en serio hiciste eso? Es genial, me da mucha risa cada vez que lo escucho.
Lo que nunca me imaginé es que a mí me iba a pasar lo mismo. La semana pasada, después del fútbol de los jueves en el oupen gayo, terminamos funes, pedro y yo morfando algo en el bolichón de salguero y sarmiento. Pasado un rato de hablar de cosas intrascendentes (qué estábamos escribiendo, los proyectos para el año que viene y otras trivialidades), derivamos en los mismos temas de siempre, los únicos importantes en una conversación de hombres: fútbol y sexo. Que gol, que casi gol, que una buena jugada, que otra, que cómo nos ganaron en el último minuto. Después, sexo: que esto, que lo otro, que sin es más lindo pero hay que ponérselo igual. Que al principio se puede sin pero sólo en la primera vuelta. Que ojo con el preseminal porque además de lubricar también embaraza. Que hay que hacer el cocodrilo, te guste o no. Que cómo se hace para aguantar más y esperar a que ella también acabe. Entonces yo, de lo más tranquilo, tiré sobre la mesa que para bancarla me ponía a pensar cosas horribles y así podía durar mucho más, algo que me parecía muy natural, por cierto. Cri cri. Cri cri. Al parecer a ellos no les resultó tan obvio. ¿En serio hacés eso? me preguntaron entre extrañados y riéndose. Yo dupliqué y dije que sí, que recreaba en mi cabeza algo muy desagradable que me acordara y que la técnica me daba buenos resultados. Entonces pedro, cagándose de risa, hizo la pregunta del millón: ¿y en qué pensás justo en ese momento? Yo le respondí: y mirá, por ejemplo, me acuerdo que en una época siempre pensaba en....

(continuará)

Saturday, November 25, 2006

Soy moderno

No fumo más

Friday, November 24, 2006

The Kids Are Alright

Rompan todo. Los dos viejitos que quedan vienen en marzo.

Wednesday, November 22, 2006

Quinteteros: richard

"Pasada la medianoche del martes, después de la lectura de Levín en Mantis (de él y de los otros, Verissimo y Osvaldo: lecturas para coleccionar), salimos unos cuantos a buscar un lugar a dónde comer. El único bar abierto era un pool con las sillas y las mesas recién barnizadas. La mesa se nos pegaba a las manos, pero había hambre. Pedimos pizza y cerveza negra. Funes prendió un cigarrillo. La moza se volvió y le pidió que lo apagara como si fuera una enfermera que hace "shhhhhhhh". Funes hizo "shhhhh", preguntó si lo podía apagar en el piso, y lo apagó. Las dos chicas de la mesa, después de comer, tuvieron que salir a fumar. Yo las seguí con la vista, y me quedé un rato mirándolas, sentadas de espalda contra los cristales del bar. Ellas volvieron a entrar y volvieron a salir. Otros tantos hicieron lo mismo. Mientras Miguel, Mairal y Coelho jugaban al pool y Funes se encargaba de meter la bola blanca cuando no debía, me dediqué a observar la procesión de fumadores. Los fumadores acompañados no son problema, dos personas que salen a fumar no son dos fumadores, son dos personas que salen a fumar. De hecho, no creo que exista el plural para la palabra "fumador". O sólo existe como un ejercicio de la imaginación, que los conjuga a todos en un mismo tiempo pero no en un mismo lugar, una torpeza más de nuestra manera de nombrar a las cosas. Fumadores. Me preocupa pensar en ellos, a la noche, en las calles vacías. Fumador. Me pregunto si los que aprobaron esta ley intuyen el riesgo que puede significar dejar a los fumadores a la intemperie, solos con sus pensamientos. La cosa se puede poner muy peregrina. Me imagino una ciudad llena de hombres y mujeres que han salido a fumar un cigarrillo a la puerta de los bares, los restaurants, los pubs. Pensando y pensando. Parece el principio de algo, aunque no sé de qué. Una escena perdida de algún policial negro. Uno de esos momentos muertos que habitan las historias (y ahí habitan, claro, los fumadores, los orinantes de baldíos, los comensales solitarios de un huevo frito al final de la madrugada, los que cambian el rollo de papel higiénico). Algo se puede romper, algo siempre se puede romper (alguien apagará el cigarrillo pero nunca nunca volverá a entrar). Yo, por lo pronto, voy a seguir acechando."


(Ricardo Romero, "Y la ciudad se llenó de fumadores", en el quinteto de la muerte, 05/10/06)

Tuesday, November 21, 2006

Quinteteros: el tigre

"-Inspector Vals, ¿usted no me entendió cuando le dije que íbamos a ir a un casamiento? -visiblemente molesto le inquirió el Subcomisario Gallo.
-Sí que le entendí, ¿por? -respondió Vals.
-¿No tiene otro traje?
-¿Qué tiene de malo éste? -retrucó.
-Primero y principal, que toda la semana lo tuvo puesto. Y la anterior también. De hecho, no sé si se lo sacó alguna vez desde que lo conocí. Segundo, ¡qué está viejo y sucio! Como quien lo usa. ¡Por lo menos podría haberse afeitado, Raúl!
-Gallo, yo no soy ni por asomo el que va a contraer enlace, ni siquiera un familiar o un invitado del novio o de la novia ¿para qué me quiere elegante?
-¡Pero, hombre! Por respeto y por una cuestión de aseo personal.
-Mire, a las ceremonias no pensamos asistir, y si el dato es verdadero, ni siquiera vamos a tener que ir a los festejos. Todavía estamos a tiempo de tener la entrevista en el bar.
-¿Y si tenemos que ir al casorio? Raúl, usted en verdad es meticuloso sólo con la profesión. ¡Vea un poco más allá de sus narices querido!
-¿Y qué se supone que puedo llegar a ver?
-¡¿Qué sé yo?! -se encogió de hombros Gallo.
-Vamos, sea específico ¿a dónde quiere llegar con esto? Usted amagó con sacar un tema.
Ruborizándose, el Subcomisario Gallo le preguntó: 'No cree que por ahí puede existir, aunque sea muy remota, la posibilidad de encontrar...'
-¿Encontrar qué?
-Encontrar el amor de su vida que lo está esperando en una fiesta de este tipo. ¡Ya está! ¡Lo dije! Prácticamente es un evento único, Raúl. Además no le parece que ya va siendo hora de que abandone la puñe... de que abandone los kinetoscopios.
Vals negó con la cabeza mordiéndose el labio inferior.
-Una interesante combinación para la fuerza resultó ser la suya Gallo: policía y celestino. Mi madre que está en el cielo le agradece, el relevo. Yo no.
-No se burle, Inspector. Mire que así es como se esquiva de forma involuntaria a la felicidad: colaborar un poco con el destino. Eso se llama atender a las probabilidades. Hay que estar pendiente de ellas.
Vals lo cortó en seco: '¿Usted está casado, señor Subcomisario?'.
-Sí. Hace más de veinte años -detalló con orgullo impostado.
-Entonces, usted es una persona mucho más que idónea para corroborar, o refutar, esta hipótesis que he realizado: se dice que cuando el hombre se casa, recién descubre el verdadero significado de la palabra felicidad. Pero ya es demasiado tarde... porque ya dejó de ser soltero.
El Subcomisario exhaló resignado: 'No hay nada que hacerle, Inspector Vals. Básicamente usted y sus deducciones me sacan de las casillas porque sabe ingeniárselas para tener la razón... como en este caso'.
Vals sonrió."



(Leonardo A. Oyola, "Siete & el Tigre Harapiento", Gárgola Ediciones, año 2005)

Monday, November 20, 2006

Quinteteros: el nene

"Las personas que trabajan en este tipo de locales son portadoras de ciertos secretos que no compartiríamos con nadie. El modo en que nos ensuciamos nos define un poco más que la basura que arrojamos: seguimos necesitando esa ropa y esas sábanas. Al permanecer en una situación de necesidad, podemos ser extorsionados, y está claro que no hay mejor manera de definir a una persona que por los motivos que la podrían hacer víctima de una extorsión.
En el laverap, cada tanto me encuentro con un tipo que monta un curioso espectáculo. Lleva su bolsa de ropa sucia y, en lugar de dejarla y partir de inmediato, como hago yo, encuentra excusas para abrir la bolsa y empezar a sacar prendas y mostrarlas, haciendo comentarios sobre la suciedad y las maneras de resolverla. Todos se incomodan allí, menos él. Es un modo de exhibicionismo muy sutil, casi encantador. Y exhibiendo, quitando el carácter secreto de sus secreciones, elimina la extorsión."



(Fragmento arbitrariamente escogido por superloyds del microrrelato "ropa sucia", de federico levín, publicado en el suplemento de cultura de perfil del domingo 12 de noviembre de 2006)

San San

El gran capitán látigo o zizou del subdesarrollo está afilando el lápiz.

Don king cucurto estrena blog y novela en emecé.

Friday, November 17, 2006

eyos i ió

se menea la mujer policía
tiene el culo de la ley
un turro en la caja quiere
hacerse un cincuentón

los pibes salen del colegio
a casa de mamá cada uno
aplastan sin futuro sus colillas
sin saber que van a matarse

el gomero el taxista
impacientes neófitos
putean por putear o
por taxistas gomeros

sale el riñón de la panza
los ojos inflados retienen
el líquido y las materias
de ese desconocido

la fiesta malcríada de los
jóvenes profesionales
se aleja en años trae
la evidencia careticida

ahí afuera yo festejo
y festejo no sé qué
tratando de entenderlos
a esos que me aplauden

Estos pibes la rompen


Mis amigos del quinteto de la muerte de nuevo dieron alto espectáculo. Esta vez me la perdí. No va a volver a pasar.

Thursday, November 16, 2006

Mi ahijada me regala poesía


Un viento y un corazón.
Hay una chica pero
el varón se murió...
tomó remedios y se murió.

(Maite CL, 4 años, 14/11/06)

Tuesday, November 14, 2006

Friday, November 10, 2006

Thursday, November 09, 2006

Sección ladris

"Es precisamente la posibilidad de realizar un sueño lo que hace la vida interesante.

Las cosas sencillas son las más extraordinarias y sólo los sabios consiguen verlas.

Uno siempre acaba haciendo nuevos amigos y no tiene necesidad de estar con ellos un día tras otro. Cuando la gente ve siempre las mismas personas acabamos haciendo que pasen a formar parte de nuestra vida. Y como forman parte de nuestra vida, pasan también a querer modificar nuestra vida. Si no actuamos tal como ellas esperan, se disgustan. Porque todas las personas tienen una idea exacta de cómo debemos vivir nuestra vida. Y nunca tienen idea de cómo deben vivir la suya propia.

En un momento determinado de nuestra existencia, perdemos el control de nuestra vida, y ella pasa a ser gobernada por el destino. Esta es la mayor mentira del mundo."



Adivina adivinador, ¿quién es el autor?

Wednesday, November 08, 2006

Granja en imágenes: estampa de crack


Aquí
, el mejor gol de la temporada.

Tuesday, November 07, 2006

La realidad encañonada

"...y esa misma tarde compró un 38 corto, de seis tiros. Así terminaba el primer capítulo. Roberto sintió que se adentraba en una tierra de nadie. Las frases más inocentes podían ser ahora significativas; las palabras tenían otro peso, otras resonancias. Ahora había un revólver de por medio y todo estaba bajo amenaza. ¿No era exactamente eso, según Chejov, lo que diferenciaba a la literatura de la realidad? Si hay un revólver, antes de las doscientas páginas el revólver disparará. Los personajes se aguzaban: nada de lo que harían, nada de lo que dirían, sería ya casual. Empezaba a asomar la verdadera historia y todo adquiría la palpitación del drama. La realidad encañonada, eso era la literatura. Levantó la vista del libro y se detuvo a escuchar las conversaciones a su alrededor. La mujer en el asiento de atrás, por ejemplo. Parloteaba con absoluta impunidad. Estaba describiendo su casa de veraneo y podía seguir hablando por horas, detenerse en cada azulejo del baño, en cada arabesco de cada azulejo, y daba lo mismo. O podía callarse de pronto y sería igual. También el paisaje era indiferente: los postes de teléfono se repetían con irritante exactitud, él podía empezar a contar postes y contar hasta cien mil: nadie lo interrumpiría. Y si faltara un poste, si hubiera de pronto un hueco, no significaría tampoco absolutamente nada, habría una explicación inmediata, obvia, un rayo, o un vendaval. En todo había la misma inconsciencia, la misma inutilidad, el ciego dejarse suceder de las cosas. Estaban ocurriendo así, pero podían ocurrir de cualquier otro modo. Podía quitar del medio las vacas y los postes, podía quitar los azulejos uno por uno, podía quitar a la mujer en el asiento de atrás, podía luego quitarse él mismo. Nada era necesario. Allí estaba, venciendo por todos lados, la realidad de Susana: la aplastante superioridad de lo gratuito."


(Fragmento del cuento "La víctima" arbitrariamente escogido por superloyds. El cuento forma parte del libro "Infierno grande", de Guillermo Martínez, año 1989, reeditado por Planeta en el año 2000)

Monday, November 06, 2006

Thursday, November 02, 2006

ellos i llo

la chica de la cartulina
pasa rozando todo
no mira a nadie

los malditos oficinistas
viajan a la costa
vuelven con sus chalets
reservados para el verano

sus secretarias no comen
se desmayan en el baño
leen libros huecos
cogen con sus jefes

los inmobiliarios regatean
arañan ridículas comisiones
se plantan se ofenden se mean
y las casas estallan en el aire

la banda fuma porro
en cualquier lado ya
los viejos caretas los suegros
todo les chupa un huevo

entonces yo idealizo
una península aproblemática
que nadie me llame ni haya
imagen donde poder dormir

Granja en imágenes: campana

Hoy al mediodía y de traje

Tírenme un elegante sport, un casual day, algo, miren que si no en cualquier momento me aparezco toda operada en musculosa, pollera y sandalias y se van todos a la reputa madre que los parió. Carajo.

Wednesday, November 01, 2006

Anoche

Construir una buena imagen lleva años.
Destruirla, sólo segundos.