Las palabras de los individuos, sus sentimientos y pensamientos meramente subjetivos sólo muestran su verdad o falsedad, su veracidad o su mentira, su grandeza y su limitación, cuando se traducen en práctica: cuando se afirman en los actos y las acciones de los individuos, o cuando estos actos y acciones muestran su fracaso frente a la realidad. Solamente la práctica humana puede mostrar concretamente la naturaleza de los individuos. ¿Quién es valiente? ¿Quién es bueno? Semejantes cuestiones las contesta exclusivamente la práctica.
Y solamente por esto resultan los individuos interesantes unos para otros. Solamente por esto son merecedores de que se los plasme poéticamente.
Georg Lukács, ¿Narrar o describir?