Thursday, March 01, 2007
Ex gran jefe en madrid
La semana pasada ex gran jefe anduvo por madrid. Vino a adaptar trajes de algunos clientes con gustos europeos. Por supuesto que se alojó en gran hotel y se la pasó yendo en taxi de acá para allá. Nos reunimos recién el martes. El lunes en el curso su eminencia me preguntó por él pero aún no nos habíamos encontrado. Después del curso con la nueva pandilla fuimos a cenar a un lugar en la latina, menú de 8,50 incluyendo sopa, plato, postre y copa de vino, una bicoca. Y el martes supe el nombre de su hotel, me acerqué y lo encontré en la cama medio engripado. Nos pusimos al día con la charla y a la noche fuimos por unas tapas a alonso martínez. La verdad que nos la pasamos bien con ex gran jefe, además es un buen tipo y siempre me ayuda. El miércoles y jueves asistimos a un seminario intensivo dentro del curso y escuchamos disertaciones de colegas españoles muy calificados, fue muy interesante. La noche del miércoles ex gran jefe me invitó a cenar con unos amigos suyos del colegio que viven acá, a un tgi fridays justo enfrente del bernabeu. Además del contacto para el futuro resultaron muy simpáticos, y las fajitas estaban de lujo. Cuando nos íbamos, por un momento me pareció ver a la petisa cruzando una avenida, fue como una visión. El jueves al mediodía hubo un almuerzo como cierre del seminario: canapés de todo tipo, jamón serrano, salmón, salchichitas con panceta, camarao milanesa, un espectáculo. Después nos reunimos en el hotel de ex gran jefe, con la hija de su eminencia, una especie de continuadora, un sabio total la mina, y me invitó a presenciar sus clases en la universidad autónoma. El jueves a la noche ex gran jefe partió de regreso a baires y yo me junté con la nueva pandilla a tomar unas cañas, para luego acabar escabiando en un pub irlandés. Me volví caminando desde sol hasta casa, por calle de alcalá todo en subida y medio en pedo, como 40 cuadras, pensando y pensando, mirando intensamente la ciudad. Cuando llegué a la casa me acosté, con la satisfacción de saber que estoy haciendo la movida correcta. Para entonces ni imaginaba que dos días más tarde, como conté en el post anterior, iba a ver el derbi madrileño en el campo de juego. Jaja.